A juzgar por la situación actual de la defensa contra drones en los puertos militares de los principales países del mundo, existen tres amenazas principales que enfrentan actualmente y enfrentarán en el futuro:
Primero, drones pequeños despegan desde las cercanías de las bases portuarias para llevar a cabo operaciones móviles de reconocimiento, vigilancia y guiado sobre instalaciones militares. Sus principales características son que se infiltran por la retaguardia del puerto, actúan de manera encubierta y es difícil distinguir entre propios y enemigos.
Segundo, drones medianos y pequeños despegan desde plataformas marítimas de adversarios para realizar misiones de reconocimiento, guiado, hostigamiento y ataque contra puertos militares y zonas estratégicas. Se caracterizan por su despliegue móvil en el mar, su capacidad de despegue inmediato, su rapidez operativa y la dificultad para rastrearlos.
Tercero, drones de gran tamaño despegan desde territorio adversario para ejecutar operaciones de reconocimiento, vigilancia, interferencia, guiado, hostigamiento y ataque en puertos militares y teatros navales. Sus principales características incluyen una larga autonomía, amplio alcance operativo y múltiples modos de amenaza.
